Una de las tendencias de muchas firmas automovilísticas para atraer a un segmento tan interesante como son los millenials es ofrecer vehículos que les resulten atractivos, con un buen diseño, conectividad, tecnología, seguridad, buenas prestaciones y sobre tofo, un precio que sea asequible y haya buenas posibilidades de financiación.
Una de las firmas que mejor conecta con este nicho de mercado es Toyota, sobre todo gracias a la gran cantidad de modelos diferentes con los que cuenta, como por ejemplo el Aygo, un modelo que lleva ya con nosotros la friolera de 13 años y que desde ese momento se ha convertido en uno de los preferidos por la generación millenial y también por otras personas de diferentes rangos de edad, quienes apuestan por un utilitario tan versátil como este.
Fue en 2005 cuando se lanzó la primera generación del Toyota Aygo y no fue hasta el año 2014 cuando llegó la segunda. Desde ese momento, el Aygo ha ido creciendo en éxito, sobre todo en Europa, donde se han matriculado más de 760.000 unidades.
Se podría decir que este modelo es una de las propuestas más interesantes en un nicho de mercado que necesita vehículos atrevidos, originales y con la suficiente capacidad como para conquistar a los clientes más jóvenes.
Europa, objetivo de la firma japonesa
Europa es para Japón un mercado muy suculento, algo que saben muy bien, tanto gracias a este modelo como al resto de la gama que podemos encontrar en los concesionarios de la marca. Destacan por ser vehículos fiables, seguros, con una relación calidad precio estupenda y con consumos reducidos, lo que ha permitido ganarse un posicionamiento muy ventajoso en el viejo continente.
Ahora, pretenden seguir cautivando a todos los clientes tras haber reforzado algunas de las características del Toyota Aygo como su potencia, diferentes aspectos como el diseño, seguridad, eficiencia e incluso posibilidades de personalización.
Por otro lado, no hay que olvidarse de las mejoras en cuanto a eficiencia del motor para mejorar su respuesta y tacto de conducción así como una notable mejora en lo referente a las prestaciones, todo pensado para un máximo disfrute del conductor.
No hay que olvidarse del apartado estético dado que cuenta con un frontal que le proporciona una gran personalidad, sobre todo gracias a la forma característica en X. Según han avanzado desde Toyota, ha cambiado, dejando de ser un gráfico de dos dimensiones a un elemento tridimensional estructural, integrado y con más potencia.
¿Qué más nos ofrece este nuevo Toyota Aygo?
El nuevo Aygo parte de un acabado base para todas las personalizaciones (X-Play) e incluso una variante descapotable (la X-Wave), dotada de un equipamiento de serie muy completo. A ello se le suma una edición especial X-Cite.
También llega disponible con carrocería de tres o cinco puertas y la versión X-Play trae de serie el sistema multimedia X-Touch, el cual cuenta con pantalla de siete pulgadas y conectividad para Android Auto y Apple CarPlay así como llantas de aleación de 15 pulgadas, aire acondicionado, limitador de velocidad, cámara de visión trasera y luces antiniebla.
Toyota también nos ofrece packs de personalización para este modelo, con vinilos rojos y negros para el techo y también la opción descapotable.
Por su parte, el acabado X-Wave incorpora un techo deslizante, tapicería de piel, cristales tintados, entrada y arranque sin llave, climatizador automático, carcasas de los retrovisores en color negro y molduras laterales.
Si se quiere adquirir la variante más exclusiva, nos encontraremos con un modelo en color magenta metalizado con acabado bitono, tapicería Manhattan con costuras en color magenta así como inserciones en la palanca de cambios y en las salidas de aireación, llantas de aleación de 15 pulgadas en color negro exclusivo y palanca de cambios así como el borde del cuadro de mandos son de color negro piano.
¿Qué opciones de motorización nos encontramos?
Esta nueva versión del Toyota Aygo monta un motor gasolina WT-i de tres cilindros, el cual ha sido 100% optimizado para ofrecer un excelente rendimiento. Los ingenieros japoneses han trabajado mucho para conseguir que con un litro de cilindrada, la versión más básica pueda rendir una potencia máxima de 72 caballos y una mejorada entrega de par en regímenes bajos.
Asimismo han trabajado duro para poder mejorar las prestaciones y también lo han adaptado para cumplir con la exigente norma Euro 6.2, con lo que se consigue un consumo de 4,1 litros por cada 100 kilómetros de media homologada por la marca, lo que convierte a este modelo en una propuesta muy interesante.
Podremos elegir entre dos opciones de cambio, pudiendo ser la caja manual que conocemos hasta ahora o una transmisión manual automatizada X-Shift, algo que solamente lleva un incremento de precio de 650 euros según se ha informado.
No hay que olvidarse de los cambios que se han hecho en una parte tan importante como es la suspensión y la dirección, con lo que se mejora notablemente la respuesta al volante y se proporciona una mejor conducción. Desde Toyota aseguran que también han trabajado en reducir la aspereza en el habitáculo así como los niveles de ruido y vibración.
Conectividad, el gancho para los millenials
Este modelo cuenta con un fantástico aspecto de conectividad así como seguridad. Nos encontraremos con un novedoso sistema multimedia, acompañado de pantalla táctil de 7 pulgadas, conectividad a través de Android Auto y Apple CarPlay y cámara de visión trasera.
Destaca por ser el primer modelo de la firma nipona en Europa que monta esta opción de conectividad, permitiendo que algunas aplicaciones de telefonía, navegación, mensajería, música, etc., puedan replicarse en la pantalla táctil del salpicadero.
Para más seguridad, los asistentes Google Voice Command y Siri de Apple, garantizan que todo lo relacionado con el sistema multimedia pueda manejarse con total seguridad.
Finalizando, desde Toyota se afirma que el nuevo Aygo es uno de los modelos más seguros de su segmento gracias a su conocido sistema Toyota Safety Sense, un conjunto de tecnologías de seguridad activa, así como ayuda a la conducción, lo que evita o reduce la posibilidad de que se produzcan colisiones dentro de un gran espectro de opciones diferentes que se pueden dar en la carretera.