Reducir la siniestralidad en la carretera es un objetivo común de todos, tanto de conductores como del Gobierno, DGT, Guardia Civil, etc. La precaución al volante debe estar presente en todo momento y no solo en cuanto a posibles entretenimientos sino también en reducir el exceso de velocidad.
Como medida persuasiva tenemos los radares, ubicados en cualquier lugar estratégico para cazar in fraganti a quienes se dediquen a sobrepasar los límites. Si hablamos de velocidad y de radares, hay que decir que la DGT está preparando nuevos radares de pequeño tamaño.
A pesar de que no los ha presentado, ni tampoco instalados, sí se ha confirmado que ya están comprados y se encuentran en fase de homologación para poder garantizar el funcionamiento más correcto. Otro enemigo más para luchar con el exceso de velocidad en las carreteras de nuestro país.
60 radares portátiles laser de última generación
Son un total de 60 radares con tecnología láser que destacan sobre todo por su efectividad, pero también por su pequeño tamaño. Pueden cogerse con una mano y su tamaño impedirá que puedan ser detectados por los conductores más experimentados. Además, destacan por ser inalámbricos, por lo que los agentes no tendrán que estar necesariamente al lado del dispositivo.
Se llaman Velolaser, han sido desarrollados en España y cuentan con la posibilidad de controlar vehículos circulando hasta 250Km/h, tanto de día como de noche así como dos carriles, independientemente de si se trata de los de un único sentido como en ambos, tienen capacidad de diferenciar vehículos pesados y ligeros así como calcular la distancia de seguridad entre vehículos.
Otra de sus ventajas es la versatilidad que tiene, pudiendo ser instalado en infinidad de rincones como un pórtico, un vehículo, un trípode, las motos de los agentes, guardarraíles, etc., por lo que nunca se debería saber dónde están colocados. Avisados estamos.