Un coche automático es aquel vehículo que realiza por sí mismo y de manera automática el cambio de marchas, adaptándose a las necesidades de conducción en cada momento. Eso significa que el conductor no necesita estar pendiente de las marchas, y eso hace que la conducción urbana, en la que se producen cambios continuos de velocidad, sea más eficiente y sencilla.

No obstante, adaptarse a la conducción automática requiere de un periodo de aprendizaje, ya que la conducción manual requiere de una serie de operaciones que no son necesarias en los coches automáticos y que pueden resultar incluso contraproducentes. Si quieres aprender cómo conducir un coche automático, sigue leyendo.

Cómo funciona un coche automático

Antes de dar consejos sobre cómo conducir un coche automático, cabe señalar que existen distintos tipos de cambio automático según las características de su funcionamiento interno, pero todos tienen posiciones en común:

  • Parking (P)
  • Retroceso ( R)
  • Neutral (N) o punto muerto.
  • Directa (D)

Cuando cogemos el coche hay que pulsar la palanca de desbloqueo, que permite cambiar la posición del cambio, desde Parking, que es la posición en que se encuentra al estar aparcado, y pasar a punto muerto y luego a Drive, posición en la que ya podemos acelerar. A partir de aquí, sólo deberemos tocar el cambio en tres casos muy concretos:

  • Cuando necesitemos conducir marcha atrás.
  • Cuando nos detengamos durante un buen rato.
  • Cuando vayamos a estacionar el vehículo.

En todas las demás ocasiones (cambios de velocidad, frenazos bruscos…) será el vehículo el que vaya variando las marchas y adaptándose a la conducción.
En algunos modelos, existen levas o palancas en el volante para que puedas cambiar las velocidades manualmente. No obstante, esa característica tiene más de estético que de funcional, por distintas razones:

  • Es casi imposible que seas más rápido que el coche en averiguar cuál es la velocidad óptima en cada momento.
  • Si quieres meter una velocidad que no le va bien al modo de conducción, el sistema no te dejará hacerlo, ya se trate de una velocidad más elevada o más reducida.
  • En cualquier momento la velocidad que nosotros hayamos “elegido” puede ser corregida por el cambio automático.

Entonces, ¿para qué sirven esas palanquitas o levas? Pues, básicamente, para que tengas una mayor sensación de control sobre un coche que, en realidad, lo hace todo él solo.

Es decir, están diseñadas para conferir a un coche automático una pátina de coche manual, para aquéllos que afirman que el coche decida por ti no es exactamente conducir. No obstante, esa sensación de control es falsa o, al menos, inexacta ya que, aunque sí estamos controlando el coche, no lo hacemos con las levas, sino con los pies: dado que el cambio para de una marcha a otra en función de la velocidad a la que vamos, aprender a aumentar y reducir la velocidad gradualmente es aprender a evitar cambios bruscos en las marchas.

Consejos sobre cómo conducir un coche automático

Teóricamente, conducir un coche automático es más sencillo que hacerlo con uno manual. No obstante, es habitual que las personas que vienen de la conducción manual traigan consigo ciertas manías, y la mayoría de las habituales en conductores que están acostumbrados a cambios manuales nunca deberían hacerse cuando se conduce un coche automático, ya que desgastan los mecanismos y disminuyen la vida útil del coche.

Por eso, a continuación, os presentamos unos consejos que pueden ayudar a que vuestra adaptación a los vehículos automáticos sea más sencilla y que entendáis qué comportamientos debéis evitar.

No uses nunca la posición Neutral con el coche en marcha

Aunque hay quien cree que usar la posición Neutral en algunas situaciones, como por ejemplo cuando se baja por una pendiente fuerte, mejora el rendimiento del motor, lo que puede pasar es que el suministro del motor se corte y este se pare de golpe.

También es posible que esa práctica nos haga perder el control del coche. Se trata de algo tan peligroso que existen sitios en los que hacerlo es incluso ilegal, como en varios estados de los Estados Unidos.

Ni siquiera es necesario poner el coche en punto muerto cuando se para en un semáforo, ya que los cambios automáticos soportan bien esas pequeñas paradas.

Si tienes que pasar de Drive a Retroceso, nunca hay que hacerlo en movimiento

Es posible que ya lo hayas hecho alguna vez y no haya pasado nada, sobre todo si vais a baja velocidad, pero no es bueno cambiar de marcha tan radicalmente sin frenar antes. Hacerlo desgastará excesivamente la banda de la transmisión, y si se tiene que cambiar os supondrá un gasto bastante importante.

Olvídate de tu pie izquierdo

En los coches automáticos no hay pedal de embrague, básicamente porque el embragado manual no es necesario, ya que el cambio lo hace todo por ti.

Por tanto, hay que evitar el movimiento del pie izquierdo hacia ese pedal inexistente. No es que mover el pie afecte al funcionamiento de la máquina, pero sí puede afectar a vuestra concentración, que es igual de importante.

Para evitar ese movimiento, lo mejor es dejarlo reposar sobre el reposapiés que se encuentra donde no está el embrague.

Sólo cuando el coche está completamente detenido se puede usar la posición Parking

Usa el Parking cuando te detengas de manera definitiva y no olvides usar el freno de mano mientras estás aparcado para que el peso no recaiga sólo en la caja de cambios. No son comandos intercambiables, y usar la opción Parking en lugar del freno de mano sólo favorece las averías y holguras en la caja de cambios.

No obstante, si se trata de una detención larga (un atasco grave o una parada para cargar el coche sin aparcar) usa la posición Neutral.

Cuando te remolquen, recuerda poner la posición Neutral

Si tu coche no puede circular y va a tener que ser remolcado por una grúa, no olvides seleccionar Neutral antes de que empiecen a moverlo. Si no lo hacer, el sistema estará forzado.

En algunos modelos en que la selección de las distintas posiciones se hace con un comando emergente circular, puede que tengáis que desmontar las molduras para acceder si la avería o accidente ha afectado al sistema eléctrico.

Ten en cuenta estos consejos sobre cómo conducir un coche automático y todo irá bien.