Tras seis horas de Silverstone el equipo Toyota quedó descalificado. Fernando Alonso y su equipo quedaron a nada de ganar la tercera prueba del campeonato del mundo de resistencia. El problema ha sido la descalificación de dos de los coches del equipo japonés, debido a que la flexión del patín de ambos automóviles superaba el límite permitido en el reglamento. El de Fernando Alonso cedía 6 mm en el lado derecho y 8 en el izquierdo, mientras en el segundo, 9 mm en ambos lados del fondo plano.
Después de haber realizado las pruebas correspondientes, se tomó la decisión de descalificar a Toyota, lo que provocó que el equipo Rebellion conformado por Mathias Beche, Thomas Laurent y Gustavo Menezest se llevara el triunfo.
Según la escudería el motivo de la irregularidad era consecuencia de una salida de pista. Debido a la agresividad de las carrocerías y chasis, así como al asfalto bacheado de los pianos de Silverstone, se habría dañado el fondo plano de los vehículos hasta curvarlos. Los comisarios consideraron dicha posibilidad, sin embargo su decisión ha sido definitiva, por lo cual, Toyota ha presentado una reclamación en contra de dicha resolución.
De igual manera el equipo Toyota argumentó que el diseño del coche no había cambiado desde 2017, habiendo superado pruebas similares con anterioridad. En cualquier caso no es de sorprender este tipo de decisiones tan radicales por parte de los comisarios, ya que hemos visto con anterioridad situaciones similares; en Spa dejaron sin triunfo al equipo Rebellion y también le quitaron una pole al Toyota ‘7’ .
Las inspecciones que deben superar los coches a veces producen sorpresas desagradables y en esta ocasión el peor de los finales se lo llevó Toyota y Fernando Alonso quien ya había acumulado un triple victoria tanto en Spa, como en Le Mans y Silverstone. No obstante, la descalificación no tiene por qué ser definitiva y se esperará al resultado de la apelación, porque hay más coches sancionados, como el Porsche de la categoría GT, lo cual podría darle la razón a Toyota y apuntar como factor responsable a las condiciones del circuito y no a las condiciones del coche.
Fernando Alonso en el circuito
Antes de la polémica decisión, Fernando Alonso realizó una carrera espectacular durante una hora y 33 minutos, en las que dió todo un espectáculo. Durante 45 vueltas pudo rebasar a uno de sus competidores más experimentados como lo es Conway, a quien remontó cuando llevaba 2 segundos de desventaja en su contra. Alonso terminó por delante del británico, regalándole a los espectadores un relevo espectacular.
Finalmente la carrera la ganó el Toyota número 8 del ovetense, gracias al fantástico trabajo que realizó Buemi en su último relevo. 50 minutos antes de que terminara la carrera, el suizo superó al competidor japonés y completó una serie de giros que le permitieron cruzar la meta sin ninguna problema.
Por otra parte el coche de Alonso tenía una ventaja indudable dentro de la pista, por lo cual gestionaron de una mejor manera la degradación de sus compañeros de equipo. Todo ello aunado a otro factor definitivo como lo fue el error de Kobayashi, cuando realizó una excursión por fuera de la pista siendo líder de la carrera, provocó dejarle el camino fácil a Fernando y a sus compañeros. Un triunfo que terminó inesperadamente en descalificación.
Foto: Agencia EFE