Malos momentos para los coches diesel. Mientras en Alemania se discute sobre si prohibirlos en algunas ciudades y otros países decidiendo a partir de qué año se dejarán de vender por ser más contaminantes, se le suma la problemática de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) para esta clase de coches, que será más larga, se hará en profundidad y saldrá más cara.
Futuro negro para los coches diesel en la ITV
Los vehículos más contaminantes y que se encuentran en peor estado serán quienes peor lo pasen, o mejor dicho, el bolsillo de sus propietarios. Además algunas ciudades españolas están desarrollando iniciativas para prohibir la entrada a esta clase de vehículos.
Desde la Asociación de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos (AECA-ITV) así como desde la Confederación Española de Profesionales de Automoción (CONEPA), han declarado que los vehículos más viejos pero que estén bien conservados, no serán rechazados en la ITV, pero los más contaminantes tendrán que pasar por el taller para solventar sus deficiencias.
Los coches diesel que sean anteriores al año 2000 serán los más perjudicados aunque se dará un periodo de medio año, aproximadamente, para que éstos puedan ser adaptados. Desde el Real Automóvil Club de España (RACE) aseguran que se podrían incluir los diesel anteriores al año 2006 aunque dependerá también de la marca y el modelo del que se trate.
Por otro lado, la ITV podría llegar a ser más cara a partir del próximo mes de mayo. Será más larga y compleja, sobre todo por las inversiones que deberán hacerlos centros. También porque para acceder a las centralitas de los automóviles se requiere permiso de los fabricantes, lo que supone (en algunos casos) tener que pagar a las marcas, lo que repercutirá en el bolsillo de los conductores.